Los centros comerciales se están convirtiendo en espacios públicos que los ciudadanos del interior del país disfrutan. En contraste con el maltrato que recibe del Estado, el ciudadano encuentra un trato digno y amable, no discriminatorio, un buen servicio y productos de calidad. Estos negocios generan efectos colaterales positivos: crean empleo formal y elevan la recaudación tributaria. Estas son las razones que esgrime el periodista Juan Carlos Tafur para sostener que los movimientos radicales van perdiendo fuerza debido al crecimiento económico y otros factores, entre ellos lo que él llama el “efecto ‘malls’”. La única ciudad mediana que carece de uno es Tacna, por una razón increíble: se ha interpretado que la Constitución dice que, para que extranjeros puedan adquirir bienes inmuebles en zonas de frontera, se requiere de la autorización del Comando Conjunto. Hay dos operadores extranjeros que hace años la esperan. Semejante absurdo debiera corregirse. ¿O acaso queremos que estos ‘malls’ se terminen construyendo en Arica?
Autor: Gianfranco Castagnola, Presidente Ejecutivo de APOYO Consultoría
Fuente: Perú 21